Murias y Obispado presionan y amenazan a vecinos de parcela colindante por el derribo de BAM

El lunes por la tarde cayeron cascotes en el patio de los vecinos de Barrainkua 4.

Detrás de esta parte del derribo se encuentran las viviendas de Barrainkua 4.

Actualización 20.00h: En este hilo de Twitter te contamos lo que ha pasado hoy al final del día:

Construcciones Murias SA, la constructora que ejecuta el derribo y el proyecto del Obispado de Bilbao y Mutualia en la parcela de BAM, necesita de la aprobación de la comunidad de vecinos de Barrainkua 4, la parcela adyacente, para poner andamios en sus patios para facilitar la demolición. Unos andamios que inhabilitarían el uso de esos mismos patios durante las obras. Murias necesita, además, anclarse por debajo del edificio para contener las tierras cuando llegue el momento de la excavación.

A primeros de junio, Murias intentó un acuerdo rápido con los vecinos. El Obispado había esperado 2 años desde que solicitó la licencia de derribo en 2019 para intentar conseguir, en el último minuto y por la vía rápida, el permiso de los comunidad de propietarios. No lo consiguieron porque varios vecinos encontraron problemas en el acuerdo propuesto. La plataforma vecinal Abando Habitable, de hecho, ya había advertido de la falta de permiso vecinal en su recurso contra la licencia de derribo. 

A mediados de julio, Murias intentó de nuevo el acuerdo vecinal con una segunda propuesta, que incluía esta vez una contraprestación económica de 36.000€ por las molestias ocasionadas. Para ponerlo en contexto, el presupuesto de construcción del proyecto obispal es de 16,5 millones de euros (unos 19,5 millones contando los honorarios de los arquitectos), en una operación inmobiliaria de 30 millones de euros. 

Las negociaciones entre Murias y la comunidad de propietarios han tenido siempre de fondo la amenaza que se ha terminado haciendo realidad: si los vecinos no daban permiso iban a demoler igualmente sin andamios que los protegieran, y si hubiera daños por caída de cascotes ya se repararían. 

El ruido de la demolición y la presión de la constructora han estado aterrando a los vecinos. El edificio de estructura de madera de más de un siglo de antigüedad tiembla cada día desde las 8 de la mañana durante todo el horario laboral. Los temblores por el derribo infunden miedo en la comunidad de vecinos y los representantes de Murias dicen que si no ceden será peor. Con la presión de la demolición en marcha pensaban que conseguirían el acuerdo rápidamente, pero no fue así. Esta segunda propuesta tampoco fue aprobada. Poco después, este domingo, la constructora retiró su propuesta de pago económico.

El lunes por la tarde, por una operación con maquinaria pesada en la cubierta, cayeron cascotes en uno de los patios de Barrainkua 4 donde se tiende la ropa. Afortunadamente no hubo que lamentar daños personales, pero podría haber habido un desenlace fatal. La constructora del obispado parece estar cumpliendo sus amenazas.

Los vecinos presentaron denuncia ante la policía municipal cuando se personó en el bloque de viviendas afectado y en la obra. El operario de la constructora que vino a retirar los cascotes dijo que a partir de ese momento se haría el derribo con mucho más cuidado. Un día después, el martes por la tarde, un fuerte golpe hizo temblar a todo el edificio de Barrainkua 4 con más fuerza que nunca, algunos vecinos salieron a la calle por miedo a lo que pudiera pasar.

Desde la asociación vecinal Abando Habitable exigimos que el Ayuntamiento haga un seguimiento exhaustivo de estas obras que desde mayo han encadenado varias ilegalidades y están poniendo en peligro la integridad de los vecinos. Recordemos que recientemente fueron las quejas vecinales las que demostraron que la grúa torre instalada de 45 metros carecía de la preceptiva licencia y tuvieron que parar las obras. A la grúa clandestina y caída de cascotes se suman otras denuncias como la de no respetar las paradas de 10 minutos establecidas en la licencia o el lanzamiento de escombros por las ventanas, que el área de urbanismo no ha considerado punibles, pese a haberse presentado denuncia con vídeo que lo demostraba.

Desde el Ayuntamiento se ha conformado una comisión de seguimiento de las obras en la que participa la constructora y diferentes áreas municipales, pero nada se sabe sobre el contenido de lo que se habla en esa comisión, a la que esta asociación vecinal no ha sido invitada.

El obispado se parapeta detrás de la constructora Murias y no asume su responsabilidad, como si no fuera la Diócesis de Bilbao la propietaria del edificio y la parcela, y quien ha contratado a la constructora. Además, el obispo Joseba Segura se niega a dialogar con los vecinos desde hace meses. 

Otros aspectos del acuerdo 

Hay cosas poco claras en los términos del acuerdo, como cuál es la propiedad del suelo y la promotora de la obra. Murias dice que son ellos, pero toda la documentación que consta en los expedientes municipales indica que el propietario es el obispado. Murias dice que tienen acuerdos privados constructora-obispado, pero que no puede mostrarlos. Es algo crucial a la hora de determinar la responsabilidad de los seguros y quién es el responsable último en caso de que haya que lamentar algún tipo de daños.

Plazo agotado: Abando Habitable solicita archivo de licencia de construcción, el Obispado no ha pagado

Desde la asociación vecinal Abando Habitable hemos solicitado oficialmente al Ayuntamiento de Bilbao que archive, como así establece la ley, el expediente de concesión de licencia de construcción para el edificio que planea construir al haberse pasado el plazo para presentar documentación y hacer frente a los pagos requeridos, 1,6 millones que el Obispado de Bilbao debe abonar. Más información.

Otros problemas de Murias: Erandio y juicio en la Audiencia Nacional 

El grupo financiero Urbas, que compró a Construcciones Murias hace un año cuando estaba a punto de quebrar, se encuentra actualmente en juicio oral en la Audiencia Nacional por irregularidades cometidas en la ampliación de capital de la empresa. Además, Murias se enfrenta también a otras protestas vecinales en Erandio por la cesión de unos terrenos municipales.


Consulta toda la documentación en el archivo de nuestra web https://abandohabitable.org/coleccion/expediente-demolicion/

Plazo agotado: Abando Habitable solicita archivo de licencia de construcción, Obispado no ha pagado

Documento con fecha 30 de octubre de 2020 que muestra el aviso de archivo en un plazo de seis meses. Descarga documento completo.

Desde la asociación vecinal Abando Habitable hemos solicitado oficialmente al Ayuntamiento de Bilbao que archive, como así establece la ley, el expediente de concesión de licencia de construcción para el edificio que planea construir la Diócesis de Bilbao en la parcela de la antigua universidad de magisterio BAM al haberse pasado el plazo para presentar documentación y hacer frente a los pagos requeridos, 1,6 millones que el Obispado de Bilbao debe abonar.

El Ayuntamiento de Bilbao comunicó al Obispado en julio de 2020, a fin de tramitar su petición de licencia de obras para la construcción de un edificio de oficinas y la clínica privada de Mutualia que era preciso que cumpliera con los requisitos y subsanase las deficiencias señaladas en el informe municipal, concediéndole un plazo de seis meses para subsanar tales deficiencias, con la advertencia de que, si no presentara tal documentación en el plazo señalado, se le entendería por desistido en el expediente, procediéndose a su archivo.

El pasado 16 de febrero de 2021 el Subárea de Secretaría técnica de servicios generales del área de obras, planificación urbana y proyectos estratégicos del consistorio emitió providencia en la que se indicaba que el plazo había transcurrido.

A día de hoy, 30 de junio de 2021, 11 meses después del primer aviso,, no constan en el expediente justificación de los requisitos exigidos ni del pago de las unidades de aprovechamiento necesarias para el proyecto pretendido.

Entre otras cuestiones el Obispado de Bilbao debe abonar unos 1,6 millones de euros: 1,3 millones en concepto de las plusvalías y 300.000 euros por los los avales de urbanización y gestión de residuos.

Hasta la fecha el gobierno municipal, y en especial Asier Abaunza, concejal del área de urbanismo, han hecho continuada referencia al cumplimiento de la ley. No archivar este expediente, como así han advertido las resoluciones administrativas e indica la ley, es una muestra de cómo el Ayuntamiento trata de modo especial al Obispado de Bilbao. 

Otras denuncias por las obras de derribo

En las últimas semanas la asociación Abando Habitable ha puesto de manifiesto que la acción ciudadana es imprescindible para vigilar el cumplimiento de la normativa. Gracias a la denuncia de esta asociación se ha abierto expediente sancionador a la constructora Murias SA por la instalación de una grúa clandestina en la parcela obispal sin la licencia correspondiente. Otras normas que la constructora ha incumplido y que han sido denunciadas, como el lanzamiento de escombros por las ventanas del edificio en demolición, no han tenido respuesta municipal de momento.


Abando Habitable ha publicado en su web todos los documentos de este expediente municipal sobre el pago de deberes previos de la licencia de construcción (n⁰ expediente municipal 2020-028195): https://abandohabitable.org/coleccion/deberes-previos/ 

Por sus obras los conoceréis

La instalación de la grúa sobre nuestro barrio de Abando, fue un duro golpe a nuestro estado del ánimo. Nunca tengo insomnio, pero me desperté a mitad de la noche y estuve más de una hora dándole vueltas al derribo.

La grúa anunciaba la inmimente demolición del antiguo colegio de las carmelitas, la destrucción de un edificio en perfecto estado y recientemente rehabilitado. No por menos prevista la demolición nos hacía menos daño. La demolición planificada por el Obispado y ejecutada por la constructora Murias estaba en marcha.

Me levanté con sueño y nervioso. Era viernes, tenía mucho trabajo que cerrar por delante, pero decidí dedicar la mañana a ver qué se podía hacer. Llamé al ayuntamiento a preguntar si el monstruo que había puesto sobre nuestras cabezas tenía permiso. Tras una larga llamada, desde el área de urbanismo me dijeron que en el registro municipal no constaba petición ni notificación alguna de instalación de la grúa. Avisé por el grupo de Whatsapp vecinal que bajaría a la una a llamar a la policía para denunciar. Por si alguien quería acompañarme.

Ya me estaba esperando Carmen en la esquina cuando llegué. El viento había girado la grúa y teníamos la punta justamente encima. Llamé a la policía municipal mirando hacia arriba.

Primera llamda. Ha aparecido una grúa en nuestro barrio y según me han informado por teléfono en el ayuntamiento, no tiene licencia para ello.

Carmen llamó poco después para denunciar que los del derribo habían instalado un andamio en su fachada sin permiso. Murias y Obispado, propietario de la parela, no han tenido la consideración de pedirlo. Los municipales estaban ahora avisados por partida doble. Los minutos pasaban y nadie aparecía. Volví a llamar para insistir.

Segunda llamada. No hay patrullas disponibles, pero que irán cuando estén libres.

Al poco se sumó otra Carmen al grupo. Tres ya éramos multitud en aquella acera. Si la grúa tuviera ojos nos vería bajo la pancarta con el NO AL DERRIBO en letras rojas del balcón del primer piso. Una vecina pasó con prisa por allí con su hijo, que no podía quedarse pero que nos apoyaba.

Kepa pasó al rato y nos preguntó arqueando las cejas ¿Qué? Aquí estamos, esperando a la policía. Subo a dejar la compra y bajo a acompañaros.

Tercera llamada. Las patrullas están ocupadas, que vendrán cuando puedan.

Se acercaba la hora de la comida y la segunda Carmen se tenía que ir. Le dio tiempo a contarnos que ella había estado también en la AMPA del Cervantes, como Marijose o como yo. Vasos comunicantes de actividad en el barrio, las asociaciones de familias del colegio público son a veces el motor del asociacionismo vecinal. Este es un ejemplo más.

Se fue Carmen y llegó Bego minutos después. O llegó antes de que se fuera, ya no recuerdo bien la secuencia de los hechos. Que no tienen derecho a cortar la acera sin avisar. Itziar también bajó a acompañarnos, retrasaba su salida al pueblo de fin de semana.

Cuarta llamada. Que me avisen por teléfono cuando vayan a venir, que no puede ser que nos hagan esperar tanto, que tenemos otras cosas que hacer.

Me escapé a la frutería antes de que me cerraran. Dejé al resto del grupo al cargo.

Al poco de volver Kepa se unió al grupo y ya éramos cinco en la acera bajo la grúa y la pancarta. Otras banderolas con las palmeras, ya muy gastadas, contra el proyecto obispal ondeaban al viento en otros balcones. Justo hablábamos de Javier y aparecío como si nos hubiera oído. Subió a dejar algo que había comprado y se unió al grupo. Ya éramos seis.

Llevábamos toda la semana que si había que llamar a la policía, que si no habían cumplido las condiciones de la licencia, cada cuál en la soledad de su vivienda. Llamadas en solitario. Llamadas que no llegan a ningún lado. Bueno, no. La semana anterior las Cármenes estuvieron una hora bajo la lluvia esperando a que viniera la policía. Nunca llegó. No íbamos a dejar que pasara lo mismo esta vez.

Quinta llamada. Ya llevsmos más de una hora esperando. Que cuando haya alguna patrulla disponible irán.

¿Por qué no vienen? ¿Podremos denunciar cuando vengan? ¿o hay que ir a la comisaría? ¿Se puede denuncia en la Ertzaintza? ¿les llamamos? Qué poco sabemos sobre cómo ejercitar nuestros derechos. Los tenemos poco entrenados. Hace falta tener mucho tiempo y ganas para pasar de la queja al cuello de la camisa, de la queja en el chat vecinal a la acción.

Quinta o sexta llamada. Ya perdimos la cuenta. Tuiteamos que llevamos una hora y media desde la primera llamada. A los pocos minutos llegó el coche patrulla.

Un agente se metió en la parcela de las obras y el otro se quedó fuera. Tenemos muchas cosas que denunciar: la grúa, el andamio sin permiso en la fachada y el corte de la acera bajo los andamios. Resulta que no se puede deunciar en la calle, que eso solamente es para temas penales. Que lo nuestro tiene que ser denunciado en la comisaría de Miribilla. Que ellos lo que van a hacer es emitir un informe de lo que vean.

Le contamos. Nos identificamos. Tomó nota. Hizo fotos. Salió el otro municipal a decirnos que los de dentro le había dicho que no necesitaban licencia para instalar la grúa, ya que estaban en su propiedad (!).

Me tuve que ir antes de que acabara la conversación. El hambre y los hijos no perdonaban. El resto del grupo siguió hablando con los agentes. Me contaron más tarde que les dijeron que la denuncia tenía que ser en el juzgado de guardia.

Estaba mucho más animado que cuando me levanté. En la calle, llamada a llamada, somos mucho más que dos.

Epílogo: Lo que empezó juntándonos en la calle acabó unos días después con la paralización de las obras al demostrarse que la grúa de 35 metros de altura era ilegal. Así acabó la historia:

El lunes siguiente fuimos a poner denuncia al juzgado de Guardia. No la aceptaron al no ser un tema penal. Nos recomendaon ir al servicio de atención a la víctima, que nos dijo algo similar, solamente vale para víctimas de delitos. Dos días después tras varias llamadas al área de urbanismo del ayuntamiento nos informan que la grúa está instalada sin la correspondiente licencia y que han ordenado parar los trabajos. Efectivamente se trataba de una grúa clandestina. Al no poder usar la grúa empezaron a tirar los escombros por las ventanas, algo expresamente prohibido en la licencia. Nueva llamada a la polícía. De nuevo no aceptan la denuncia… pero esa ya es otra historia. A día de hoy las obras están paradas.

Bilbao, 21 de junio de 2021.

Paralizan obras demolición por grúa clandestina

Paradas las obras de la grúa torre utilizada en el derribo de la BAM tras la denuncia de Abando Habitable al estar instalada sin autorización.

Al no poder usar la grúa la constructora Murias ha empezado a lanzar los escombros por la ventana, algo prohibido por la licencia de derribo.

Pedimos al Ayuntamiento de Bilbao que también sancione esta flagrante infracción

El Ayuntamiento de Bilbao ha decidido parar las obras que estaba realizando una grúa torre en el derribo de la antigua Escuela de Magisterio (BAM) tras la denuncia que hemos hecho desde la plataforma Abando Habitable, ya que estaba instalada sin la autorización precisa. 

La grúa torre tiene aproximadamente 35 metros de altura y está en la parcela de la BAM desde el día 10 de junio realizando diversos trabajos, pese a que en el proyecto de demolición del edificio no está prevista ninguna instalación de este tipo y se ha instalado y usado sin tener la licencia para ello. El propio Ayuntamiento nos reconoció al día siguiente que no consta autorización expresa para su instalación, por lo que desde nuestra Plataforma hemos registrado una queja oficial en el Consistorio.

Finalmente, el Ayuntamiento ha decidido parar las obras que estaba realizando esta grúa “clandestina”, lo que supone un reconocimiento expreso de que se estaba cometiendo una ilegalidad, que no es la única y nos tememos que no será la  última porque se están produciendo ya varios incumplimientos de las condiciones de la licencia de derribo de la BAM. La grúa torre, además, no cuenta con la autorización obligatoria de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) como también hemos denunciado la asociación Abando Habitable ante el organismo estatal.

Como la constructora Murias tiene prohibido usar la grúa ha empezado en el día de ayer a lanzar los escombros por las ventanas, algo expresamente prohibido en la licencia y que añade un nuevo motivo para la paralización de las obras. También ha incumplido con la obligación de regar «los escombros con continuidad y de forma necesaria para evitar polvareda».

Vecinos de Abando consideramos que no es suficiente con esa paralización de las obras de la grúa y no se entendería que no hubiera una sanción ante esta flagrante infracción.

CAMPAÑA CUOTA SOCIOS 2021

En el mes de mayo se cumplen dos años desde que pusimos en marcha la asociación Abando Habitable, y toca renovar la cuota de socio.

Ha sido un año duro. A la despedida de nuestras palmeras al comienzo del curso en septiembre y a las dificultades que la pandemia nos ha puesto para mantener viva nuestra reivindicación entre los vecinos del barrio y el entorno del colegio Cervantes, se suma desde hace dos semanas el desalojo del antiguo BAM previo a las obras de derribo. Está siendo un camino difícil y de mucho trabajo. Sabemos, por que así nos lo transmitís algunos de vosotros, que hay cierto desánimo y sensación de que poco se puede hacer ya. Nada más lejos de la realidad: hemos conseguido retrasar casi dos años el derribo y todos y cada uno de los actores que protagonizan este esperpento urbanístico saben que no vamos a parar y que a cada paso del camino nos encontrarán peleando y haciendo todo lo posible por paralizarlo. 

A veces perdemos la perspectiva de todo lo realizado. Por eso, os adjuntamos una memoria de todas las actividades (ver PDF), trabajos y actuaciones que hemos realizado durante 2020. Os sorprenderéis al ver lo que, con el esfuerzo de todos, hemos sido capaces de poner en marcha. 

Una línea de actuación clave para la paralización de las obras de derribo y construcción del nuevo edificio planeado, es el del recurso tanto en vía administrativa como ante los tribunales de los distintos instrumentos y licencias urbanísticas necesarios para la consecución del pelotazo. Actualmente, estamos a la espera de la admisión por parte del Tribunal Supremo del Recurso de Casación que se presentó contra la sentencia del TSJPV por la que se desestimaba la demanda contra el Estudio de Detalle y contra la modificación del PGOU por la que se admitía otros usos equipamentales diferentes al educativo. Ésta, la judicial, es una vía larga y costosa, también desde la perspectiva económica. 

Por todo ello, por todo lo que aún nos queda por hacer, os pedimos un nuevo esfuerzo económico, con la renovación de la cuota. Además, cualquier donación adicional, sea cual sea la cantidad, es bienvenida. Y, por supuesto, como ya lo hemos hecho en otras ocasiones, os animamos a involucraros activamente en la asociación. ¡¡¡Toda ayuda es necesaria!!!

Os recordamos que la cuota asciende a 30€ anuales.

De cara a facilitar su abono, hemos incorporado nuevas formas de pago:

  1. Transferencia bancaria al número de cuenta que tiene Abando Habitable en Kutxabank: ES20 2095 0551 6191 1907 4721. (Kutxabank). ¡¡NO OLVIDÉIS PONER EL NOMBRE Y APELLIDOS!! y así poder identificar a quién pertenece la cuota.
  2. Bizum al número de teléfono de la asociación: 634 484 063.
  3. Pago con trajeta habilitado en nuestra página web. (Por cada 30€ nos cobran una comisión de 0,67€).
  4. En metálico
  • Secretaría de Cervantes: de lunes a viernes de 11:00 a 11:30h hasta finales del mes de junio.
  • En la cita de las fotos con la manzana verde: todos los jueves de 11:00 a 12:00h en la calle Heros esquina con Lersundi.

Para cualquier duda, consulta o cualquier otra cuestión a este respecto, no dudéis en poneros en contacto con la Asociación, vía telefónica  o whatsapp (634 484 063) o vía mail (info@abandohabitable.org).

Eskerrik asko danori!!

Pedimos paralizar las obras del derribo ante los primeros incumplimientos de la licencia aprobada

Obras de demolici´ón en marcha el 31 de mayo de 2021.

La asociación vecinal Abando Habitable y la AMPA Cervantes hemos presentado quejas ante el Ayuntamiento de Bilbao por los primeros incumplimientos en la condiciones impuestas en la licencia de derribo de la antigua Universidad de Magisterio (BAM), que deberían llevar al Consistorio a la paralización inmediata de estas obras.

En marzo de este año el área de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos del Ayuntamiento de Bilbao concedió al Obispado de Bilbao y  Construcciones Murias la licencia de obras para la demolición del edificio de la BAM, situada en el barrio de Abando, junto al Colegio Cervantes.

Sin embargo, no se puede obviar que esa licencia está condicionada al estricto cumplimiento de las normas que regulan la materia y, sobre todo, a lo que en particular indican las medidas impuestas por el ayuntamiento. En mayo empezaron a realizarse ya algunas obras y, desde entonces, se han producido los primeros incumplimientos, tal y como nos temíamos.

En concreto, se han realizado catas sin avisar cuando en las condiciones de carácter general de la licencia se especifica textualmente que «en caso de apertura de catas se colocará un letrero indicando la empresa que las realiza y razón que las motiva».

Además, hemos detectado en algunos momentos, como el pasado 1 de junio, que las obras no paran a las horas en punto durante diez minutos como viene establecido. Dada la actual situación de pandemia, es preciso ventilar adecuadamente las aulas del Colegio Cervantes y, si ya era insuficiente cesar las obras solo durante diez minutos, resulta especialmente grave que ni siquiera se esté respetando esa condición establecida en la licencia.

El Ayuntamiento no puede permitir tareas ruidosas incumpliendo el horario aprobado, como está ocurriendo, por ello desde la AMPA Cervantes hemos solicitado tener acceso continuado a las mediciones de ruido del sonómetro instalado en la fachada del colegio con motivo de estas obras.

Asimismo, el estudio de impacto acústico considera oportuno informar a los vecinos de los bloques de viviendas más próximos a las obras «de cuándo se van a desarrollar estas fases, su duración y el horario concreto en el que vayan a tener lugar las tareas más ruidosas», algo que tampoco se ha cumplido en esta ocasión.

También se incluía en las condiciones que la licencia de obras debe hallarse siempre en el lugar donde se realicen, algo que no se está produciendo cuando, además, no cumplir este requisito es suficiente para la paralización inmediata de los trabajos.

Por todo ello, creemos que el área de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos, que concedió la licencia, debería controlar el cumplimiento de las normas en las obras que se ejecutan, debido a la proximidad de los edificios de viviendas y de un centro escolar con alumnado vulnerable. En caso de incumplimiento, como está sucediendo de forma reiterada, debe paralizar las obras de forma inmediata. Los avisos a la policía municipal han sido infructuosos.

Esperamos que, en este caso, no se mantenga la “inacción” que viene mostrando la corporación municipal, que todavía no ha dado respuesta a los recursos de reposición que hemos presentado contra la concesión de la licencia de derribo.

Mientras, también esperamos que se constituya la prometida comisión de seguimiento de las obras entre ayuntamiento, CEIP Cervantes, constructora (Murias) y propiedad (Obispado), prometida para mayo y que aún no se ha conformado.
Todos los documentos del expediente de demolición están disponibles en nuestra web.

Obras y ruido en horario lectivo frente al CEIP Cervantes.

Cita los jueves: Salvar la manzana 31

Se oyen golpes… Retomamos nuestra cita de los jueves.

El único espacio libre que aún respira en el barrio de Abando está amenazado por un proyecto de la diócesis de Bilbao, que ya ha arrancado dos palmeras icónicas, centenarias. Quieren demoler la (¿antigua?) Escuela de Magisterio BAM para construir una gigantesca mole de cemento destinada a albergar su nueva sede y una clínica privada de Mutualia. La cancela está cerrada, pero sabemos que hay movimiento en el patio. El ruido ya ha comenzado.

Este hueco se ubica en la antigua manzana 31. A escasos metros, cada mañana más de 300 niñas y niños acuden al Colegio Público Cervantes.

Imaginad por un momento que este sinsentido se hace realidad y que, tal y como pretenden este verano (ya mismo) comienzan tirar el edifico (en perfecto estado, por cierto). 

Preguntas obligadas: ¿Estamos locos? ¿Es que esta pandemia no va a servir para pensar en clave verde? ¿Se le puede hacer esto al alumnado y profesorado de un colegio? ¿Por qué semejante despilfarro? ¿Quién gana y quién pierde con este pelotazo?

Si eres capaz de esbozar lo que no tiene que pasar, acércate el jueves de 11 a 12 h y te sacamos una foto con una manzana verde frente a la manzana 31 (esquina Heros con Lersundi). 

Es urgente.

Recurso contra la licencia de derribo

ABANDO HABITABLE Y AMPA CERVANTES PRESENTAN RECURSO CONTRA LA LICENCIA DE DERRIBO

Descarga la nota de prensa completa.

Actualización: acércate a la Revuelta Escolar hoy a las 16:30h en el Cervantes. Lersundi 10.

Dentro de la estrategia general de paralización del proyecto Obispado-Murias-Mutualia que tiene la asociación Abando Habitable, la paralización del derribo ha sido y sigue siendo una de nuestras prioridades de actuación. En este sentido, a finales de la semana pasada presentamos, junto con la AMPA del Colegio Cervantes, un recurso en vía administrativa contra la Licencia de las obras de derribo del edificio BAM que concedió con fecha 29 de marzo de 2021 el Ayto de Bilbao a la constructora Murias, S.A.

La preocupación de AH es máxima. A pesar de todos los esfuerzos que hemos realizado, alegaciones incluidas, a lo largo de todo el proceso administrativo de concesión de la licencia de derribo, el Ayuntamiento se ratifica en su posición no sólo de permitir el derribo, sino de hacerlo en unas condiciones a todas luces insuficientes para garantizar tanto el normal desarrollo del centro escolar y de la Haurreskola de Cervantes, como la vida del resto de vecinos del barrio de Abando.

Fundamentalmente, el recurso presentado se centra en la falta de medidas que aborden adecuadamente los problemas de ruido y el polvo generados con las obras de derribo. Concretamente, se subraya la insuficiencia de las paradas de 10 minutos para compatibilizar las obras con las necesidades de ventilación de la Haurreskola y el Colegio Cervantes en tiempos de pandemia. La comunidad científica lo deja claro: los estudios realizados demuestran que ventilar 10 minutos/hora es insuficiente, siendo la ventilación constante, junto con el adecuado uso de la mascarilla, una de las medidas más efectivas, sencillas y útiles a la hora de reducir el riesgo de contagio de COVID-19 en los espacios cerrados. Así de rotundos se expresaban una serie de científicos en la carta de apoyo a la AMPA de Cervantes que publicaron en el mes de abril.

En cuanto a la problemática de las partículas en suspensión, cabe subrayar que las obras de construcción producen emisiones a la atmósfera de contaminantes que pueden afectar a la salud de las personas expuestas, siendo dicha exposición más peligrosa en el caso de las niñas, niños y ancianos, aumentando el riesgo cuando se pasan muchas horas en este tipo de ambiente. A pesar de ello, y de que el propio Estudio de Impacto Acústico presentado por la Constructora Murias, S.A. reconoce la generación del polvo, el informe del Área de Salud del Ayuntamiento se limita a establecer la recomendación genérica de realizar una vigilancia ambiental en materia de partículas en suspensión en el entorno del colegio. Una recomendación que no se ha concretado en ningún tipo de medida en la concesión de la licencia. Únicamente se prevé la instalación de una malla de plástico que no servirá de barrera protectora, no al menos completamente, ya que sólo se prevén andamios para las fachadas norte y sur del edificio, quedando libre la fachada del este, la que da a la calle Heros.   

Puedes descarga y leer el recurso completo en este documento.

A continuación os facilitamos el comunicado que en relación al recurso ha publicadola AMPA de Cervantes con el recurso completo.

Concentración: No al derribo, sí a ventilar

En defensa de la salud y en contra del pelotazo.

Ventilar 10 minutos no es suficiente.

🏦 Frente a la sede de Mutualia, esquina Henao con Heros. Bilbao
🗓 Miércoles 14 abril 2021
🕐 13:15h a 14:15h

Actualización del 14 abril 2021: AMPA Cervantes y Abando Habitable van a presentar sendos recursos de reposición en contra de la aprobación de la licencia de derribo en los próximos días.

Cobertura en medios:

En TeleBilbao.

A pesar de las múltiples contradicciones en los documentos presentados por la constructora y el peligro que supone en plena pandemia para la salud del vecindario y comunidad escolar del CEIP Cervntes el Ayuntamiento de Bilbao ha aprobado la licencia de derribo del edificio de la exuniversidad de BAM.

Tienen previsto comenzar las obras en verano, para en teoría no coincidir con el periodo lectivo, aunque, como se ha expuesto múltiples ocasiones: las obras durarán seguramente más de lo que se dice (su propio Estudio de seguridad y salud dice que durarán 4 meses) y que la actividad de la Haurreskola (guardería) no termina hasta finales de julio.

Actualización del 14 abril 2021: AMPA Cervantes y Abando Habitable van a presentar sendos recursos de reposición en contra de la aprobación de la licencia de derribo en los próximos días.

Ventilar 10 minutos es insuficiente

El ruido y polvo de las obras harán imposible mantener las ventanas abiertas de manera continua para ventilar convenientemente. La ventilación durante solo 10 minutos cada hora como propone la empresa constructora y ha sido validado por los técnicos y gobierno municipal es INSUFICIENTE para renovar el aire dentro de un aula.

El cierre de ventanas durante cincuenta minutos supone que la probabilidad de contagio se multiplique por tres o por cuatro al alcanzar niveles de CO2 de entre 1.500/2.000 ppm (en función del número de alumnos y actividad a realizar). Miembros destacados de la comunidad científica apoyaron reciente a la AMPA Cervantes en su denuncia de que ventilar 10 minutos cada hora es insuficiente.

La Administración siguen sin entender que la principal vía de contagio de una enfermedad respiratoria como la COVID-19 es la aérea. Una incorrecta ventilación y alcanzar dichos niveles de CO2 supone multiplicar el porcentaje de aire respirado previamente por otras personas.

Algunas muestras de apoyo de la comunidad científica:

Responsables políticos

Desde la Asociación Abando Habitable tenemos claro que es el Gobierno del Ayuntamiento de Bilbao, formado por PNV y PSE, y más concretamente, Juan Mari Aburto (Alcalde), Alfonso Gil (Teniente Alcalde), Asier Abaunza (Concejal de Planificación Urbana y de Obras), Koldo Narbaiza (Concejal de Educación y presidente del Consejo de distrito de Abando), Yolanda Díez (Concejala de Salud) y Álvaro Pérez (Concejal de Medio Ambiente), quienes van a permitir el derribo de la antigua sede BAM en Abando en la actual situación de pandemia.

Más aún, sin el cambio de uso que aprobó el consistorio para la parcela, permitiendo además del educativo, otros usos terciarios, la operación Obispado-Murias-Mutualia no sería posible. Predica una ciudad verde, pero con su actuación Abando pierde su última oportunidad de crear un parque de proximidad que el nuevo PGOU establece como necesario para el barrio.

La recalificación del PGOU ha sido recurrida al Tribunal Supremo por Ekologistak Martxan.

Cómplices necesarios

Pero no nos engañemos, este pelotazo requiere de otros actores necesarios, sin cuya participación, la operación no podría salir adelante. Junto con el Obispado, propietario de la parcela, y Murias-Urbas, constructora encargada del proyecto, la mutua Mutualia es cómplice imprescindible en esta operación especulativa y totalmente desproporcionada para un entorno saturado de ladrillo.

Es Mutualia quien va a ocupar la mitad del edificio proyectado con una nueva clínica, sin importarle el impacto que el mismo va a tener en el barrio de Abando, en sus vecinos y especialmente, en el Colegio Cervantes y sus alumnos en el actual contexto de alarma sanitaria originado por el COVID-19. Una demolición frente a la escuela impediría el correcto ventilar de las aulas con el consiguiente peligro de contagio.

Concentración miércoles 14 de abril a las 13:15h

Por todo ello, tras la marcha que celebramos en octubre pasado contra el derribo y que acababa frente a las oficinas de Mutualia, convocamos nuevamente a la ciudadanía a una concentración frente a dichas oficinas, esquina Henao con Heros, que tendrá lugar el miércoles 14 de abril, de 13:15 a 14:15h.

Queremos denunciar alto y claro el papel protagonista que Mutualia tiene en el proyecto y consecuente derribo. No vale echar más balones fuera, como ha hecho hasta ahora, escudándose en el resto de actores. Mutualia puede y debe replantearse si quiere ser parte de este pelotazo.

La manzana 31

Hace más de un siglo, los gestores de la planificación urbana de Bilbao proyectaron este plano enumerando las manzanas del Ensanche, que en su mayor parte estaba aún sin edificar.

Plano del Ensanche de Bilbao de 1924. Hemos indicado en verde la ubicación de la parcela de la antigua universidad de magisterio BAM, sin construir.

Casi cien años después, todas las manzanas que aparecen en este plano están ocupadas por edificios. En ese tiempo de acelerado crecimiento, los gestores municipales no se preguntaron por la necesidad de alternar el cemento con espacios verdes. Hasta hace relativamente pocos años no se hablaba de contaminación, de ciudades amables y de otras muchas consideraciones que hoy sí se tienen en cuenta en todos los países con cierto nivel de bienestar y cultura.

Entre las manzanas 20-21-22-24-25-26-29-30-31-32-35-36-37-38-45 no hay más que un espacio triangular, la Plaza de Jado (bajo la palabra «Colón» en el mapa), que contiene árboles para absorber la contaminación, un lugar para que las niñas y niños puedan jugar y bancos para que la vecindad pueda disfrutar y descansar al aire libre

Actualmente sólo hay una pequeña parcela sin construir (marcada en color verde en este plano). Se trata del patio de recreo de la antigua Escuela de Magisterio BAM, perteneciente a la Diócesis de Bilbao. Casualmente, ese espacio libre de edificaciones se encuentra frente al único Colegio Público del barrio de Abando que, por cierto, tiene unos espacios de recreo muy reducidos.

No hace falta que les expliquemos lo que está proyectado para ocupar esa parcela. Si el proyecto se ejecuta, ese pequeño espacio dentro de la antigua manzana 31 dejará de ser la última oportunidad de disfrutar de un parque de proximidad para el entorno vecinal y para las niñas y niños del Colegio Cervantes.

Estamos en un momento difícil de la Historia de la Humanidad. Esta pandemia está dañando en todos los frentes. Por favor, saquemos conclusiones inteligentes y con proyección de futuro. No pensemos solamente en los costes económicos, pensemos en algo más importante: Ayudar a salvaguardar la salud y el bienestar de la vecindad, una ciudadanía que ha depositado su confianza y sus impuestos en gestores que deben velar por el bien común.

Llevamos ya tres años pidiendo por todos los medios y a todos los estamentos gubernamentales, que se replanteen revertir los planes que, desafortunadamente, han devenido en la peor solución posible para ese trocito de verde. El trato que hemos recibido ha transitado entre el ninguneo y la negación de toda posibilidad de cambio de planes, incluyendo la falta de consideración sobre la salud del alumnado del Colegio vecino.

Ustedes firmaron en junio de 2018 un documento que decía: “Estamos ante un nuevo contexto de movilidad urbana donde el coche no tiene preferencia; cambio que abre un gran abanico de nuevas posibilidades de convivencia y disfrute y el descubrimiento de nuevos espacios y la posibilidad de interactuar entre la ciudadanía…”. Mientras decían esto, cambiaron la calificación del único terreno libre de Abando y están dispuestos a dar luz verde a la construcción de una Clínica que implica tráfico de ambulancias, visitas, etc. Y ello, en medio de tres de las calles más estrechas de la zona. Hay que leer el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) y actuar en consecuencia. No vendamos una ciudad amable y atractiva sólo para que venga el turismo o el Tour de 2023.

Recuerden que la alcaldesa Careaga quiso derribar la Alhóndiga para construir casas. Gracias a la insistencia de la ciudadanía, hoy tenemos Azkuna Zentroa. Al igual que sucedió entonces, ahora se nos presenta la oportunidad de dejar a las siguientes generaciones una pequeña zona verde que ayude a combatir la contaminación, mejore el bienestar emocional y físico y la conciencia medioambiental de la ciudadanía. Todavía están a tiempo de revertir las cosas. Cualquier excusa es menos importante que el bien común.