La manga riega y aquí no llega

Capturas del vídeo del 4 de agosto 2021.

Poco a poco va desapareciendo. Golpe a golpe de taladro va desintegrándose. Ahora ya es una ruina, aunque hasta hace poco fuera un edificio en perfecto estado y recientemente rehabilitado.

Algunos lo ven como algo ineludible. Para quienes hemos intentado defenderlo como patrimonio común y memoria, para quienes valoramos el valor de lo construido, nos duele cada mota de polvo. No por menos anunciada es menos dolorosa la demolición. En un tiempo de preocupación energética y medioambiental se derriba un equipamiento en perfectas condiciones. Lo que un bombardeo de hace 85 años no consiguió (está documentada la caída de una bomba) lo conseguirá el afán de lucro.

El derribo empezó a finales de mayo, con la demolición silenciosa de los interiores. Sólo las vecinas de la parcela colindante podían oírlo y sentirlo. Le siguió la instalación de los andamios, que anunciaban a la vista de todos que esto iba en serio. Tras dos años de tramitación del expediente ya no parecía haber vuelta atrás. Tras el arrancado de las palmeras esta era la enésima trompeta del apocalipsis que anunciaba el final.

Semanas después llegó la grúa clandestina, que sólo gracias a la perseverancia de las denuncias vecinales hizo actuar al Ayuntamiento para que advirtiera a Murias y Obispado de que se hubiera instalado sin que se hubiera tramitado la pertinente licencia municipal. A unas obras que tienen una comisión de seguimiento se les había colado una grúa de 45 metros de altura. Una comisión en la que, por otra parte, sólo están presentes la constructora y el ayuntamiento, sin ninguna contrparte que verdaderamente vigile.

Desde la primera semana empezaron las quejas y maldiciones vecinales. No llegan lejos si no se presentan oficialmente. Las denuncias a la policía sí sirvieron para darnos cuenta de que los municipales no iban a hacer nada para parar las irregularidades detectadas en las obras: escombros por la ventana, nubes de polvo e incumplimiento de los horarios. Aprendimos que, como mucho, servían para levantar atestado de la situación, pero poco más.

Las denuncias por registro municipal del 2 y 17 de junio no fueron objeto de informe del área de obras hasta el 12 de julio. La notificación a nuestra asociación fue registrada el 21 de julio y no nos llegó, a los denunciantes, hasta el 26 de julio. Esto es, pasaron casi 8 semanas desde la comunicación de la primera irregularidad hasta que fuimos informados. Un informe que, por otra parte, decía que se estaba haciendo todo correctamente pese a que nosotros habíamos presentado un vídeo que mostraba lo contrario. Hemos creado un archivo digital para que podais acceder a todos los documentos del expediente.

A nuestro parecer no hay mecanismos efectivos de control por parte del ayuntamiento de Bilbao. Los escombros y polvo, tras nuestras denuncias, se riegan puntualmente para cumplir expediente, pero no sirven para reducir las nubes de polvo que se generan. No se riega durante la demolición. Los horarios estipulados en la licencia tampoco se cumplen. La modificación del proyecto de andamios pra la demolición, porque los vecinos de la parcela colindante no dieron permiso para instalarlos y Murias-Obispado los instalaron igualmente, no ha sido presentada en el Ayuntamiento y por lo tanto validada. No hay registro reciente en el expediente municipal al respecto de unos andamios que instancias municipales vinieron a validar en persona.

Todo esto en una licencia de obras que el gobierno municipal, con el concejal de urbanismo Asier Abaunza a la cabeza, no paró de calificar antes de su aprobación como “acto reglado”, pero que a la hora de cumplir las medidas establecidas parece que no existen las reglas. Se nos decía que había habido muchas obras similares ¿en todas ellas se cometen tantas irregularidades en tan poco tiempo? Murias-Obispado hacen y deshacen como quieren y aquí no pasa nada.

Diario de grabaciones en abandohabitable.org/obras

Por todo ello, desde Abando Habitable hemos instalado un vídeo-streaming (abandohabitable.org/obras) para que los señores y las señoras inspectoras municipales puedan ver en directo las obras y todos los incumplimientos de los que hablamos. Bueno, todos no, porque algunos quedan ocultos, pero se lo ponemos fácil. Pueden revisar los vídeos de días anteriores… además de pasarse por las obras de vez en cuando.